Este domingo dio inicio el Abierto de Australia 2018 y el mejor tenista tricolor y especialista en dobles, Santiago González, intentará revertir la historia en Melbourne del tenis mexicano.

Escasa participación azteca

La historia de México en el primer Grand Slam de la temporada es prácticamente inexistente.  Desde el arranque de la Era Abierta en 1968, las mejores raquetas nacionales de los 60s y 70s como  Rafael Osuna, Raúl Ramirez, Antonio Palafox, Vicente Zarazua y Joaquín Loyo Mayo no vieron participación en Melbourne.

La primera aparición de los representantes nacionales en el Abierto de Australia se presentó hasta finales de los 80, con Leonardo Lavalle cuando en 1989 alcanzó la cuarta ronda en singles. Ese mismo año en dobles, Agustín Moreno llegó a segunda ronda con el croata Igor Flemo, mientras que la pareja de Leo Lavalle y Christian Saceanu no pasaron de la primera ronda. Dos años más tarde Jorge Lozano consiguió el mejor resultado para los mexicanos al llegar a cuartos de final de pareja del estadounidense Todd Witsken.

En los 90s la participación mexicana fue poco notable con Luis Enrique Herrera, quien participó en 1991 y 1993. Mientras que en dobles, sólo en 1991.

Ponen la vara alta nuevamente las mujeres

Si bien a nivel varonil los resultados positivos fueron escasos, en la rama femenil las mexicanos ya han dejado huella en Melbourne.

En 1962, Yolanda Ramírez logró colarse hasta las semifinales en singles. Tres años más tarde, Rosa Maria Reyes llegó hasta semifinales de dobles.

Tuvieron que pasar casi 30 años para que México viera de nueva cuenta participación en el cuadro femenino de Australia, Angélica Gavaldón logro colarse a cuartos de final en 1990 y 1995.

Resultado histórico en juveniles

En 1990 el cuadro juvenil del Abierto Australiano dio un resultado que no se volvió a repetir en la historia del tenis mexicano, Ernesto Muñoz de Cote junto al canadiense Robert Janacek lograron la final juvenil, donde cayeron ante la dupla de los suecos Roger Pettersoson y Marten Renstrom.

En singles, Oliver Fernández aprovechó su condición de quinto favorito en la siembra y logró colarse hasta las semifinales, instancia donde cayó ante el eventual campeón Dirk Dier.

Santiago y su cruzada en el país de los canguros

Santiago González ha sido el tenista mexicano más exitoso de la última década, pero en Australia su rendimiento no ha sido bueno a excepción de la edición del 2012. 

En su debut en Melbourne en 2011, Santiago logró segunda ronda en dobles, y al siguiente año consiguió su mejor resultado al colarse hasta los cuartos de final, pero desde 2013 no ha logrado superar la primera ronda. Sin embargo, este año las expectativas son mucho más altas, tras de llegar hace unos días hasta semis en Auckland de pareja del chileno Julio Peralta.

En algún momento se tiene que empezar a revertir la historia del tenis mexicano en el Abierto Australiano y que mejor que en este 2018. ¡VAMOS SANTIAGO!