Evolución del Tenis

Estrategia vs. poder en el tenis femenino

2017-01-16
Estrategia vs. poder en el tenis femenina

Chris Evert, la ex número uno del mundo y 18 veces campeona de Grand Slams, destaca la pobreza táctica y mental del tenis actual en la que el poder lo es todo.

Los materiales cambiaron el juego

"El juego es realmente diferente ahora", comenta Evert, "En mis días tenías que ser mentalmente muy fuerte ya que carecías de potencia". Y es que los materiales de la época imposibilitaban realizar servicios de 200 km/h y lanzar continuos cañonazos desde el fondo que se convierten en winners. Aquellos días en los que el tenis era, ante todo, estrategia, algo más cercano a una partida de ajedrez que a un tiroteo de videojuego. "El tenis de entonces se basaba en el desplazamiento, la precisión y la consistencia", explica Chris Evert. Atributos que hoy en día vemos en contadas jugadoras del circuito. El caso más paradigmático es sin duda el de Agnieszka Radwanska, una tenista que en la época de Chris Evert hubiera llamado mucho menos la atención que ahora por su estilo de juego. Pero su tenis calmado, táctico y elaborado le han valido el título de La Profesora. Quizá también podamos poner en esa categoría a Roberta Vinci y Carla Suárez, pero nada más.

El nuevo juego del Knock Out

"Ahora en cambio lo que se ve es fuerza bruta, potencia y peloteos más cortos", cuenta Evert. “Las Williams son el mejor ejemplo. Son el modelo del tenis actual, un tenis demoledor que busca desmoronar al adversario, y de ningún modo tantearlo y valorarlo para gradualmente someterlo. Un tenis que encuentra su razón de ser en conseguir la victoria por la vía del cloroformo, del K.O. En cualquier caso, lo que siempre se echa de menos es la inteligencia, la estrategia y la imaginación. Lo que más le falta al tenis y al tenis femenino especialmente”.

Efecto del coaching según Evert

"Las jugadoras no son mentalmente tan fuertes ahora", opina Evert. "Ante todo porque en mi época no teníamos 'coaching', no nos quedaba otra que arreglárnoslas nosotras mismas. Ahora hay demasiado, tienen muchas oportunidades y recursos todas las jugadoras", sentencia la estadounidense. “No nos engañemos. El coaching viene a paliar, a tapar, a restarle importancia justo a lo que más gloria le ha dado a este deporte: la lucha mental, el litigio entre dos mentes por encima de raquetas, pelotas y una red de por medio. Todo va encaminado al espectáculo, pero se pierde en el camino la esencia y la verdadera magia. Parece que lo único que se busca es el tenis de videoconsola, donde la mente no actúe, solo ejecute”.

Autor: 
Oscar Rodríguez Gómez y Edgar G. Allegre