En los próximos años, la realidad virtual cambiará nuestras vidas tanto como lo hicieron en su momento las innovaciones tecnológicas del teléfono móvil y el Internet.

Especialmente cambiará la forma en que experimentamos el deporte, pues podremos vivenciar que se siente sacar a 250 km por hora, devolver un servicio a esta velocidad o reaccionar a un tiro al cuerpo con una volea ganadora.

Los Google Glasses y tecnología como Go Pro nos acercarán a  la experiencia de cómo se siente ganar un match point en Wimbledon en el quinto set, tras un partido de más de tres horas.  Este enorme salto tecnológico sin duda alguna constituirá parte del entrenamiento psicológico y emocional de los tenistas infantiles y juveniles que aspiran algún día a vivir presencialmente este momento en la cancha central.

Pero de acuerdo a los expertos la realidad virtual no sólo nos permitirá “meternos en los zapatos” de los ganadores, sino también de los menos afortunados. ¿Qué se siente llorar como finalista en la ceremonia de premiación al quedar tan cerca de realizar tu sueño de levantar el trofeo? o ¿qué se siente perder en la qualy y no ganar suficiente dinero para cubrir tus gastos de viaje?

El tener acceso a todo esto no sólo creará mejores tenistas, sino también nos hará mejores seres humanos al aumentar nuestra inteligencia social y permitirnos mayor empatía.

¿Qué se siente ser Roger Federer? Ve este video del Maestro Suizo con Google Glasses