En la última semana y media, Indian Wells 2018 nos ha dado un avance de quién podría ser la sucesora a mediano plazo de Serena Williams y de paso convertirse en la primera tenista japonesa en ser la reina del ranking de la WTA.

Noami Osaka, talento deportivo y potencial comercial

Para entender de dónde viene Naomi, habría que primero mencionar que su papá es haitiano, estudiante de NYU, quien también vivió en Japón, donde conoció a su esposa, de nacionalidad nipona.

Naomi, quien tiene 20 años de edad, nació en Japón en  1997, se mudó a los Estados Unidos a los tres años de edad y hoy día reside en Fort Lauderdale, Florida.

Con este bagaje, Osaka podía haber elegido representar a Estados Unidos, Haití o a Japón. El optar por la opción del país del Sol Naciente, fue una decisión inteligente desde el punto de vista comercial que le ha asegurado el patrocinio de varias compañías japonesas como Nissin y Wowow, quienes también tienen como embajador al astro más grande del tenis japonés , Kei Nishikori.

Naomi, de 1.80 mts. de estatura y con un físico impresionante, es una de las más jóvenes jugadoras dentro del TOP 50 de la WTA. Este año en Indian Wells, finalmente se destapó derrotando fácilmente en sets consecutivos a la No. 1 del ranking, Simona Halep en semifinales, y en rondas anteriores a dos ex No. 1, María Sharapova y Agnieszka Radwanska. 

Con su triunfo, Naomi se convierte en la primera tenista oriental en ganar en Indian Wells y considerando que la superficie dura es su favorita, está destinada a ser protagonista en el segundo semestre del año, tanto en los Masters 1000 norteamericanos, asiáticos y europeos como en el US Open 2018.