Enero y febrero son los meses en los que el tenis visita y conciente a Latinoamérica.

La primera escala del “Latin Slam” es Santiago de Chile con el MoviStar Open, continuando con el Brasil Open y la Copa Claro en Buenos Aires, para concluir en Acapulco con el Abierto Mexicano.

Estos torneos son los más importantes de la región designados categoría ATP 250, excepto el Abierto Mexicano que es ATP 500.

Para su edición 2011, ninguno de estos torneos que se juegan sobre arcilla y que reparten en premios entre $450,000 y $1.2 millones de dólares, contó con tenistas TOP 5 y todos ellos fueron ganados por españoles.