Entrevista al mejor doblista español, David Marrero
2013-12-09Oanar un Gran Slam y jugar Copa Davis, sus objetivos para 2014
David Marrero era un niño hiperactivo, por esta razón su padre le regaló una raqueta playera a la edad de cinco años para que jugara contra la pared. Hoy día Marrero es el mejor doblista español y quinto mejor del mundo de acuerdo al ranking de la ATP y acaba de cerrar una temporada increíble al derrotar a los gemelos Bryan de pareja de Fernando Verdasco y adjudicarse el título en la Final del ATP Tour en Londres el mes pasado. Nuestro amigo, David López Corralo lo entrevistó recientemente.
Comenzar por felicitarlo por la victoria en las Finales ATP de Londres junto a Verdasco, ¿cómo recuerda ese momento?
Es una alegría inmensa, que no puedo explicarla con palabras. Ha sido mucha alegría toda esa semana. Fue la final soñada y creo que mejor no pudo ir. Éramos los novatos y encima ganamos en la final a la mejor pareja del mejor. Un sueño hecho realidad y esperemos que podamos conseguirlo año tras año.
¿Cómo dice, una victoria ante una pareja que ya les había derrotado este año en Roma y Roland Garros y a usted junto a Seppi en Wimbledon?
Contra ellos yo había perdido las cuatro primeras veces, tres con Fernando y una con Seppi, por lo que fue una gran victoria. Salíamos con la ventaja de que teníamos muy poco que perder y muchísimo que ganar. Eso nos dio tranquilidad a lo largo del partido y cuando llegamos al super tie break estábamos muy mentalizados de que cuando tuviéramos una oportunidad tendríamos que estar muy serenos para poder aprovecharla. Al final tuvimos una y la aprovechamos.
¿Cree que jugaron en Londres su mejor tenis del año?
La verdad es que este año hemos tenido buenos resultados y buenas semanas, pero en Londres jugamos muy bien. Ganamos a la pareja campeona del US Open, a los que eran los vigentes campeones y ganamos a los Bryan. Hay que jugar a muy buen nivel para poder derrotar a estas parejas. Tuvimos muy buenas sensaciones desde que comenzamos a jugar y, después, con el paso de los días estuvimos más tranquilos, yendo de menos a más.
Como bien dice derrotaron a los vigentes campeones, Granollers y Marc López, de momento siempre les han ganado en sus enfrentamientos, ¿les tienen tomada la medida?
La verdad es que se nos da bien jugar ante ellos por el tipo de juego. Nosotros somos pegadores de fondo y a ellos nuestro tipo de juego no sé si les va bien o no, pero nosotros con el suyo sí nos sentimos cómodos y, afortunadamente, tenemos el cara a cara a favor.
Usted jugó con molestias el tercer partido de grupo en Londres, ¿temió en algún momento que esas molestias fueran a más y no pudiera rendir al máximo en las semifinales o incluso en que no podría jugarlas?
No, no, para nada. Fue una pequeña molestia que me surgió el jueves a lo largo del día, pero estaba tranquilo porque no era nada importante y esas molestias remitirían en horas o en un día o dos. Nosotros jugamos ese partido el jueves y ya no disputábamos la semifinal hasta el sábado, por lo que no pensé en ningún momento en que tendríamos que dejarlo.
Con la final en Shanghai prácticamente dejaron sentenciada su presencia en Londres, aunque luego no fueron capaces de cerrarla en Valencia y, en París, donde necesitaban una victoria, también tuvieron que esperar a los resultados de sus perseguidores. ¿Pensaron en algún momento que no clasificarían para Londres?
Con la final de Shanghai es cierto que dimos un paso importantísimo para la clasificación para Londres, ya que nos alejamos de nuestros rivales directos para una de esas plazas. Es cierto que en Valencia nos quedaba un partido para clasificar y no lo ganamos, volvimos a tener la oportunidad en París, donde tuvimos un match ball, pero tampoco pudimos ganar. No cerramos nuestra clasificación, pero sabíamos que era muy difícil, por los números y la combinación que tenía que darse, que nos quedáramos fuera. Estábamos un pelín preocupados, pero sabíamos que era casi imposible que nos quedáramos fuera.
Sorprende el hecho de que después de ganar a Londres haya disputado dos torneos Futures, ya que no es algo habitual.
No es muy normal, la verdad. Yo nunca he visto que un ganador de un Masters se vaya a jugar después Futures, pero yo lo tenía apalabrado con uno de mis mejores amigos, tenía ilusión por jugar en mi isla (Las Palmas) algún torneo, donde yo empecé mi carrera deportiva y en ningún momento se me pasó por la cabeza el no jugarlo por el hecho de ganar el Masters. Vine aquí en plan vacaciones, de disfrutar con mis amigos y, obviamente, dar el 100%. Las cosas han salido bien, ya que hemos podido ganar uno de los dos Futures disputados.
Como hecho anecdótico, ¿podría explicar por qué no ha sido el primer cabeza de serie en dobles siendo el número cinco del mundo en la disciplina?
Por la sencilla razón de que mi compañero no tiene ni un solo punto ATP. Lo que quiere decir que aunque yo sea el número cinco del mundo si juego con un compañero que no tiene puntos ATP se anula el ranking del otro jugador. Pero no solo no es que no seamos cabezas de serie, es que si no llegamos a tener las invitaciones de los torneos, no los podríamos haber jugado. De aquí a febrero aún queda mucho, aunque bien es cierto que me ilusiona y me gustaría formar parte del equipo español.
En su perfil en el sitio web de la ATP, usted afirma que su sueño sería llegar a ser Top 10, que ya lo es, y ganar un Grand Slam, ¿para cuándo esto último?
Este año (2013) hemos perdido en cuartos de Australia y Roland Garros y esperamos, tanto Fernando como yo, dar un pasito más en 2014 para intentar meternos en las semis y por qué no, en la final de un Grand Slam, y ya una vez allí intentar hacerlo lo mejor posible.
Otros de sus deseos, como ha dicho en más de una entrevista, sería jugar con España en Copa Davis, ¿se ve convocado para jugar ante Alemania?
De aquí a febrero aún queda mucho, aunque bien es cierto que me ilusiona y me gustaría formar parte del equipo español. Es uno de los sueños que me gustaría cumplir e intentaré hacerlo lo mejor posible para tener opciones de estar en Alemania y ayudar al equipo en esta primera eliminatoria.
Y mirando más a largo plazo, ¿se ve jugando en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro?
Queda mucho, pero quién no quiere acudir a unos Juegos Olímpicos. Si las lesiones me respetan y el físico me aguanta espero estar al máximo nivel los máximos años posibles y ójala pudiese estar entre los convocados para ir a Rio 2016.
Usted antes compaginaba individuales y dobles, ¿cuándo llegó a la conclusión que se dedicaría de forma exclusiva al dobles?
Fue un poco por obligación y necesidad. Yo estaba en el número143 del mundo en individuales y ese año no me empezó a ir bien, y sí en dobles. Empecé a perder muchos puntos en individuales y a ganarlos en dobles y una cosa me llevó a la otra, ya que mi ranking de dobles me permitía jugar torneos ATP y el de individuales, no. Gané con Marc López mi primer ATP en Estoril (2010) y ahí ya empecé a centrarme más en el dobles, con la suerte de que volvimos a ganar juntos en Hamburgo. Ahí, ya cerré definitivamente mi lucha en individuales y me centré en dobles.
Como ha comentado ganó sus dos primeros torneos con Marc López, ¿por qué decidieron dejar de jugar juntos?
No hubo ninguna razón por la que dejamos de jugar juntos. A él le surgió la oportunidad de jugar con Marcel y a mí con Fernando, que es uno de mis mejores amigos, y la suerte es que nos ha ido bien a los cuatro. Creo que fue una decisión bastante acertada por parte de los dos.
Con Verdasco jugó algunos torneos en 2011, pero empezaron a hacerlo de forma continua en 2012 después de ganar Buenos Aires y Acapulco
Exacto. La idea surgió, además de por la amistad que nos une, porque él había dejado de jugar con Feliciano y me dijo que le apetecía probar conmigo. Es cierto que la primera vez que jugamos juntos, en Acapulco, no nos fue bien, ya que yo estaba muy nervioso, era la primera vez que jugaba con alguien del nivel de Fernando y no estuve a la altura. Luego jugamos en Indian Wells, donde fue bastante mejor, igualmente perdimos, pero las sensaciones fueron diferentes. Ya no volvimos a jugar en todo el año juntos, pero fue por su calendario individual, él tenía una serie de compromisos y no vio la opción de jugar dobles. En 2012 decidimos volver a jugar, con la suerte de que ganamos Buenos Aires y Acapulco. A él le gustó como fue todo y desde ahí empezamos a jugar el mayor número de torneos juntos siempre que su calendario individual lo permitiera, quedándonos a las puertas de clasificar para Londres. Este año fuimos más en serio y con la mente puesta en jugar el Masters. Solo hemos ganado un torneo, mientras que en 2012 nos llevamos cuatro, pero hemos sido más regulares y logramos la clasificación, alzando ahí nuestro segundo título de la temporada.
Ha comentado que en su primer partido juntos, usted sintió mucha presión por jugar con un tenista de tal categoría
Así es. Por más amigo que sea, no deja de ser una responsabilidad. Es cierto que en los momentos importantes él te va a ayudar mucho más, pero también es cierto que yo intentaba más que jugar mi mejor tenis, no hacerlo mal. Algo que me hizo no rendir al 100%. Por suerte Fernando me ayudó mucho, me conoce muy bien y el tercer o cuarto partido junto a él jugué mucho más tranquilo, sin esa presión y fue mucho más fácil para mí.
También ha dicho que en 2011 no jugaron más debido a la dedicación de Fernando al individual. Imagino que será usted quien tenga que adaptar su calendario al de Verdasco
Es muy duro jugar individuales y dobles durante todo el año, y sé la dificultad que le supone a Fernando tanto por físico como por edad. Él es un jugador de individuales y las semanas que decida jugar dobles estaré ahí para jugar con él. Él hace un esfuerzo increíble jugando más semanas de las que un singlista de su nivel debería de jugar, pero siempre dice que juega muy a gusto conmigo y mientras sea así seguirá haciendo un esfuerzo.
Por tanto, ¿seguirán jugando juntos la próxima temporada?
Sí, sí, no hemos hablado de no jugarla. Mientras que las lesiones le respeten y siga con la misma ilusión que ha tenido estos años en el dobles, él me ha dicho que seguirá jugando, porque le gusta jugar y, sobre todo, conmigo, por suerte para mí también. Asi que como te he dicho, mientras le respeten las lesiones seguiremos jugando juntos el próximo año.
Hablaba del esfuerzo que supone jugar individuales y dobles, Sara Errani también nos lo comentaba en una entrevista y apuntaba que más que cansancio físico, suponía un esfuerzo mental, de estar todo el día en el club esperando el dobles
Claro. Date cuenta que un partido de la jornada individual puede alargarse tres horas y tienes que esperar para jugar el dobles, ya que los individuales tienen prioridad. Si no juegas el dobles ese día puedes estar descansando en el hotel o irte al terminar tu individual, pero si tienes que jugar el dobles no puedes. Todo eso suponen horas de descanso que no tienes, y entre unas cosas y otras se hace duro.
Imagino que para un doblista también debe ser complicada esa espera
Exacto. Siempre se da prioridad a los singlistas de jugar primero su individual. Eso supone a un doblista estar casi todo día en el club, para apoyar a nuestro compañero, si juega individuales, para calentar, por si los partidos van rápidos o no van tan rápidos. Todo eso nos requiere estar más tiempo en el club.
Cuando Ricardo Sánchez empezó a entrenar a Verdasco, el español comenzó a jugar mejor y a dar el nivel que se espera de él, ¿notó usted esa mejoría de su compañero en el dobles?
Ricardo supo llevar por una línea más profesional a Fernando, lo que hizo que Fernando volviera a tener buenos resultados y recuperara el buen nivel de juego. Ricardo hizo un buen trabajo. Yo sigo pensando que con el tenis que tiene Fernando es un delito que no esté entre los 15 primeros del mundo, pero influyen otros factores que no solo son tenísticos.
Hay en ocasiones de Verdasco se va de los partidos, ¿cómo soluciona usted ese problema cuando le ocurre en el dobles?
El conocer y ser amigo de tu compañero tiene muchos puntos a favor, este es uno de ellos. Yo sé cuándo Fernando se está yendo del partido o anda saturado y sé cómo encarrilarlo para que ese despiste se solucione cuanto antes. Eso implica el conocerse, estar el día a día con él. Lo mismo le ocurre a él, que también sabe cuándo estoy peor en el partido y sabe solucionarlo.
Para terminar, hemos visto como ustedes hacen un corazón con las manos al ganar sus partidos, ¿tiene alguna explicación?
No tiene ninguna explicación, son tonterías nuestras. Ganamos un partido y lo hicimos y ya desde entonces. Es algo que nos sale innato, pero no tienen ningún sentido ni explicación.