Tenis en México

Santiago (casi) toca el cielo

2017-06-12
Santiago toca el cielo

Santiago González se quedó muy cerca de replicar la hazaña de Raúl Ramírez en 1977 de coronarse en dobles en Roland Garros, pero como finalista también ha sentado un precedente histórico muy importante.

40 años después se repite la historia

Raúl Ramírez fue el último tenista mexicano en levantar un cetro de Grand Slam en 1977, año en el que ganó Roland Garros en compañía del estadounidense Brian Gottfried. Este sábado la historia casi se repitió, pues de nueva cuenta un mexicano y un estadounidense llegaban a la final del torneo parisino, pero esta vez se tendrían que conformar con ser subcampeones.

Encuentro decidido por errores no forzados

En un encuentro cerrado, González y Young fueron superados por Harrison y Venus por 7-6 6-7 6-3. Desde el inicio, Harrison mostró el factor clave que terminaría por encubrarlos, su poderoso servicio, ya que fue el único jugador que no afrontó oportunidad de quiebre en contra.

Young adoleció de nerviosismo, condición que el mexicano trató de subsanar acercándose a él para tranquilizarlo, pero este fue un encuentro donde los errores no forzados marcaron la diferencia y desgraciadamente terminaron por condenarlo a la pareja mexico-estadounidense. .

Semanas de ensueño

El torneo de la mancuerna González-Young fue totalmente un sueño, en cuartos de final derrotaron a la dupla de Bruno Soares y Jamie Murray, ex números uno del mundo, y lograron remontar en ese partido un punto de partido en contra. En semifinales nuevamente remontaron ante Fernando Verdasco y Nenad Zimonjic, luego de perder el primer set vinieron de abajo para meterse a la gran final y culminar un sueño de dos semanas que desgraciadamente no terminó con el campeonato en sus manos.

LO QUE TIENES QUE SABER

Haciendo cuentas de lo que vale un comercial de 30 segundos en ESPN, compañías como Telmex, Telcel, Aeroméxico, Gatorade, y otras, no reaccionaron con la agilidad requerida  para poder capitalizar de la presencia de su marca con un parche cosido en la playera de Santiago durante las dos horas y cinco minutos que duró la transmisión de la final.

Independientemente del sentido económico de patrocinar nada menos que al finalista de dobles del Roland Garros 2017, el mensaje es que hay que nuestros deportistas necesitan más apoyo corporativo.

Autor: 
Edgar G. Allegre e Iván Aguilar Alcalá